A puño y letra
Una charla con Mandi Tuchtfeldt, integrante de Azul de ciervo, editorial independiente de la ciudad de Rio Cuarto, donde apuestan a los mensajes colectivos, creando así la Bacanal, un espacio de encuentro donde se intercambian saberes, afectos y escritos para resistir a puño y letra.
Por Santi Rodríguez
Donde caben todas esas preguntas que llegan como bocanada?
Me quedan pocos amigxs con los que pueda llorar leyendo poemas en las plazas
Donde sienta que nada es suficiente frente a esta pena que se gestó desde antes de mi
Ese lugar profundo que está en algún lugar del mundo
Que lo chupa todo cuando no hay milagros que brillen cerca de las cosas
Tengo una nostalgia a eso que fue, pero también a eso que se está creando y no logró ver
Como si no pudiera pestañar frente a tanta inmensidad
Me imagino como es el mar
Como si fuera una extensión de mí
Si no puedo tener otra sensación
La arena, el agua, el sol y su aroma pasan a ser parte de mis huesos y ya no sé dónde terminó yo y donde empieza el paisaje
La edad me dio el regalo de saber guardar lo necesario para mañana
Pero también me Quito (a veces) la posibilidad de arrebatarme en los sucesos
Quiero que sea cotidiano
Que lloremos
Porque es simple amar
Como besar apasionadamente un poema.
-Fotos y poesía: Mandi Tuchtfeldt
Crear espacios de encuentro en estos tiempos es necesario para la construcción de redes de afecto, en una esquina con una birra, en una plaza con unos panfletos o hasta en un espacio cultural en ronda leyendo alguna poesía, son espacios necesarios para expresar un claro y contundente mensaje político y que en medio de tanta incertidumbre es necesario reproducirlo.El encuentro es político.
¿Qué es La Bacanal?
La Bacanal es un espacio que nace en el marco de un encuentro que empezamos a organizar con amigas que se llamaba slam de poesía, comenzó en Guarida. Después fue mutando, algunas familias se fueron a vivir a otros lados y yo decidí seguir con esa posibilidad de generar este espacio en mi casa taller de azul de ciervo. La Bacanal es un espacio para experimentar desde el lugar de la poesía, no quedarnos solamente en leer poesía, sino también abrirnos a la experiencia performática. Creo que la poesía tiene la posibilidad de lo performático y me parece que cuando se pone en escena colectivamente es mucho más fácil que pueda brillar ese lado.
¿Cuáles propósitos se construyen?
El propósito de La Bacanal es generar un espacio de contención y de creación para que se multipliquen las voces de acá, en Río Cuarto, de un montón de personas que ya escriben, que ya hacen “perfo”, que tienen ganas de salir a escena. Y quizás en el marco de un arte riocuartence tan cerrado, es difícil romper con eso todavía acá. Y por eso, La Bacanal es lo que busca, hacer que converjan todas las formas de expresión usando como excusa la poesía. Pero poder lograr algo que sea toda esta corriente junta en escena para brillar.
¿Por qué es importante generar estos espacios colectivos?
Con Azul de ciervo venimos generando espacios colectivos hace nueve años. Estuvimos en un montón de espacios a lo largo de toda nuestra historia. Después los deshabita y se construye a partir de todo lo que vivió y hay cosas que están buenas y te quedan cosas que no están tan buenas. Yo creo que igual aunque yerre en los espacios colectivos, y aunque tengan que a veces desaparecer o rearmarse o preguntarse un montón de cosas, me parece que es necesario compartir y crear colectivamente. Porque es la única manera. Es poder generar algo que cambie, algo que haga que valga la pena seguir militando el arte. Si el arte no es colectivo no tiene sentido. El arte no puede ser para algunes pocxs.
¿Qué dificultades se presentan en crear estos espacios?
La dificultad de crear espacios colectivos creo que es la misma que sucede en muchas lugares, que es la poca visibilidad que hay del arte fuera de los entornos oficiales. Todo lo que no es oficial le cuesta mucho poder generar una continuidad; sobretodo en Rio Cuarto, porque no hay presupuesto, porque todo se hace a pulmón, porque todo se hace con las ganas, porque mi amigo me hace el aguante. De hecho, La Bacanal y muchos otros espacios existen gracias a que nuestres amiges nos hacen el aguante. Son elles quienes vienen las primeras veces y están acá y ponen el cuerpo. Te compran la birra y te compran la empanada para que vos siga pudiendo sostener eso que querés hacer. Y siempre es el mismo problema sacarle valor desde lo oficial o se cree que es arte serio y todas las otras expresiones que hay, que son increíblemente potables, increíblemente fuertes y que tienen que ver con lo que realmente es la pulsión de un lugar, de lo que realmente es la cultura de un espacio. Acá hay un montón de gente que escribe, un montón de gente que se expresa de miles de formas, al fin y al cabo lo que se visibiliza en un montón de espacios oficiales son casi nada de todo lo que hay en las calles, en los barrios, en la juventud y en otros estraros.
¿Qué intercambios se generan en el espacio?
Nosotros como Bacanal, viéndolo del lado poético, el intercambio que hay es increíble, es ver todo el tiempo y nos pasó en estas bacanales, que todo el tiempo viene gente nueva o gente joven también, gente que no conocemos y que tiene ganas de leer y ese intercambio es increíble y lleno. Por otro lado, el intercambio económico que hay es la cantina. La Bacanal se solventa por la cantina vegana, no cobramos entrada porque también nos parece un acto político no cobrar entrada, me parece que es fundamental el acceso de todes para poder venir y escuchar un poema, leer uno, participar. También está la boutique que es un espacio que se cede para feriar y que a veces feriamos también.
¿Cómo es la experiencia bacanal?
Yo diría que la experiencia bacanal es como un eclipse ahora que hace poco vivimos un eclipse, algo intenso que no sabes cómo te va a pegar porque a veces venís y le pasa a muches que tienen muchas ganas de leer y no se animan, otres que vienen re decidides a escuchar y se animan a subir a leer, otres que nos saben que significa la bacanal y vienen acá y se dan cuenta de que hay un montón de seres que tienen el corazón en la mano y se animan a mostrarlo. Me parece que es un poco en eso, la intensidad transformada en poema.